Gabriela, una joven desprolija y atractiva que se acerca a los 30, regresa a Bogotá después de algunos de años de ausencia. A su arribo, intenta localizar a Felipe, un viejo amor, pero éste ya no vive en el edificio de siempre. Por eso Gabriela sale tras Javier, un flaco, desaliñado que siempre ha sido su alma gemela, mejor amigo, su versión masculina, un man que ella sabe manejar a voluntad. El reencuentro se convierte en un festejo de licor y sexo. Finalmente, Gabriela pregunta por Felipe a lo que Javier, desganado al saberse siempre el segundón, le dice que efectivamente se ha mudado con Paula, su nueva novia y con Ramón, su hijo que ronda los dos años.
Gabriela, algo contrariada, sale en busca de Felipe según las indicaciones de Javier. Comienza a espiarlo levemente para descubrir que, en efecto, ahora es un padre de familia que vive con su novia e hijo. Gabriela acude a Javier y lo persuade para que se aparezcan casualmente en casa de Felipe simulando una cena de reencuentro por su llegada a la ciudad. Javier se deja convencer y cede.
Felipe se reencuentra con Gabriela y el choque para él es inmediato, es evidente que hay una historia entre ellos y que aún hay heridas abiertas. Gabriela se muestra sutil y perspicaz, traba amistad con Paula y juguetea con Ramón sin que ella sospeche nada y la cena se efectúa con perfecta normalidad: buena comida, unas copas, conversaciones de mesa, risas, etc., como si efectivamente se tratase de un par de amigos que se reúne después de mucho tiempo. Al final, la noche se ha prolongado y los invitados se quedan a dormir en el sofá de la casa.
Al otro día, Paula y Ramón salen a una cita en el pediatra. Gabriela aprovecha la situación para estar a solas con Felipe y se le mete en la cama, le hace el amor sin que éste pueda tener reacción alguna. Javier lo observa todo.
Bastante confundido con la reaparición de Gabriela, Felipe sale en su búsqueda para encontrarla en casa de Javier y descubrir la relación clandestina que ellos sostienen desde hace mucho tiempo. Gabriela sale tras un herido Felipe y se confrontan en el parque: descubrimos que Gabriela es la madre de Ramón y Felipe le reclama su abandono y su reaparición. Sin embargo, Gabriela lo persuade y comienza a manipular la situación, le plantea una propuesta a Felipe: dejarlo todo e irse con ella y con Ramón para Argentina a empezar una vida de cero, una vida en familia como siempre soñaron.
Felipe, confundido, regresa a casa y se plantea el dilema de la propuesta de Gabriela. Entre tanto, Gabriela vuelve a su casa y se encuentra con sus padres: lleva una relación tempestiva con su padre y su madre trata de persuadirla para que tome las decisiones correctas por el bien de Ramón. Pero Gabriela está convencida de su actuar y una vez más empaca las maletas. Por su parte, Felipe observa a Paula y a Ramón y decide que él ya tiene una familia y rechaza la oferta de Gabriela, cosa que la conmociona completamente.
Pero Gabriela está dispuesta a todo y vuelve con Javier. Lo manipula y le plantea la misma propuesta: que se vayan juntos a Argentina y aunque Javier se lo piensa, ella le recalca que no se irían solos: se llevan a Ramón. Cosa que condiciona la decisión de Javier pero Gabriela, perspicaz como siempre, abre una duda, Ramón puede ser hijo de cualquiera, de Javier o de Felipe, pero indudablemente es hijo de ella y por él ha regresado. Así que sea lo que sea, piensa irse con Ramón. Javier, bastante contrariado y dubitativo, la sigue.
En consecuencia, Javier se aparece por casa de Felipe, engaña fácilmente a Paula y se roba a Ramón, sale a toda prisa de allí y emprende huida con Gabriela rumbo a la frontera.
Se detienen en un hotel de carretera a pasar la noche. Javier, visiblemente confuso, desiste de la oferta ya que le pesa la culpa de estar haciendo lo incorrecto. Gabriela procura persuadirlo una vez más con sus encantos pero esta vez Javier ha tomado una decisión que supera su amor por ella. Así que al final, le plantea que va a regresarse a Bogotá con Ramón y ella se ofrece en llevarlos a primera hora de la mañana mostrándose comprensiva y lúcida. Sin embargo, al despuntar la mañana, Gabriela hace su jugada maestra y deja dormido a Javier mientras abandona el hotel con Ramón entre brazos.
Finalmente, madre e hijo se enfilan carretera abajo rumbo al horizonte.
Camilo Medina (co-director, co-guionista):
(n. 1986 en Bogotá, Colombia). Guionista, realizador audiovisual, productor, director y docente universitario. Cursó estudios de Medios Audiovisuales en el Poli, de Guión Cinematográfico en el SICA de Argentina, beca IBERMEDIA para Desarrollo de Proyectos Cinematográficos en Panamá, beca del FDC para diplomado en Producción Ejecutiva y Marketing de Cine en la UMB y tiene un Máster en Cine Digital de la ULL de España. Ha escrito, dirigido y producido proyectos para cine, televisión, internet, publicidad y audiovisuales. Destacan: Guión, 4 Grados (2008, premiado en el CineMAiubit de Rumania); Organismo (2011, 1er puesto Rally Cinematográfico del Festival de Cine de Santander); Ctrl + P (2012, Oro Profesional Festival 140 Caracteres); Cinemateca Paradiso (2012, Mención Especial 40º Aniversario Cinemateca Distrital de Bogotá); Alicia (2013, corto para el TCBA); El Adiós (2013, Festival Cortopunzante); Del Otro Lado (2015, Mejor Serie Web en IndieFest USA, Sicily Web Fest ITALIA, Rockzeline FRANCIA, Río Web Fest BRASIL). Una Mujer (2015) es su ópera prima de largometraje.
Daniel Paeres (co-director, co-guionista):
Nació en Bogotá el 31 de mayo de 1986. Llevó a cabo sus estudios cinematográficos en el Politécnico Grancolombiano en Bogotá y en el Centro de Formación Profesional del Sindicato de la Industria Cinematográfica Argentina (S.I.C.A.) en Buenos Aires. En el 2007 realizó, en colaboración, el documental "Restaurando la historia" sobre los procesos de restauración y conservación de los bienes muebles de templo doctrinero de Oicatá (Boyacá). Como trabajo de grado de sus estudios de cine en el 2008, escribió y dirigió un segmento del mediometraje "4 grados" integrante de la muestra ganadora del premio "Mejor retrospectiva cultural en el XII festival de escuelas de cine" CINEMA-IUBIT (Bucarest, Rumania), 2008. En el 2015 escribió, dirigió y montó, en colaboración, su primer largometraje, "Una mujer", protagonizado por Diana Giraldo, Sebastián Serrano y Daniel Castaño, y producido íntegramente por el colectivo cinematográfico independiente FRIC-FRAC FILMS del que hace parte. Actualmente cursa estudios de posgrado en la Facultad de Filosofía de la Pontifica Universidad Javeriana en Bogotá.
Andrés Serrano Rojas (Productor):
(n. 1985. Bogotá, Colombia) Cursó estudios de pregrado de Medios Audiovisuales con énfasis en producción y dirección de cine en el Politécnico Grancolombiano.
Su tesis colaborativa “4 grados” fue premiada en el Festival Cinema-IUBIT en Rumania en 2008. Fue Asistente de Dirección y Productor Ejecutivo del largometraje “Pequeños Vagos”, ópera prima del director colombiano Carlos Zapata.
Así mismo, ofició como Productor del largometraje “Una Mujer”, ópera prima de Daniel Paeres y Camilo Medina, obteniendo el premio a mejor película del Festival de Cine de León 2016 y participando en diversas selecciones oficiales alrededor del mundo en países como Tanzania, Rumania, México, Estados Unidos, Chile y Argentina.
FRIC-FRAC FILMS
FRIC-FRAC es un colectivo audiovisual colombiano cuyo objetivo es la producción cinematográfica. Somos un grupo de amigos que llevan más de diez años haciendo cine y que para 2016 concretamos nuestro primer largometraje titulado “Una Mujer”.
Para la realización de este filme impusimos un modelo de producción en el cual los recursos fueron totalmente auto-gestionados y donde el estilo fílmico se desenvuelve en función de una logística posible y una ejecución regulada del presupuesto. El costo de producción del largometraje fue cercano a los US$1000.
Nuestro siguiente objetivo es la realización de un nuevo largometraje, donde pretendemos expandir el capital humano y económico, pero sin dejar de ser los dueños de nuestro modelo de producción.
Creemos en un cine independiente, hecho entre amigos, que permita explorar la autenticidad de los relatos personales. Creemos en la palabras de Truffaut:
“El cine del futuro será mucho más personal, como una novela individual y autobiográfica, una confesión, o un diario. (…) El cine del mañana no será dirigido por funcionarios de la cámara, sino por artistas para quienes la filmación de una película será una aventura maravillosa y emocionante. El cine del futuro se parecerá a la persona que lo hizo, y el número de espectadores será proporcional a la cantidad de amigos que el director tenga”.